Viernes 28 de octubre 2011
Estamos todavía en los juegos Panamericanos y si México gano muchas medallas, en Dacot queremos la nuestra. Queremos competir en la categoría “Salir atrasados” no es tan fácil como lo parece, estamos todos unidos para lograrlo, esto es el espíritu de equipo.
Para empezar, en lugar de dejar el pueblo a las 15h vamos a salir a las 17h, siento que vamos muy bien con el propósito de la medalla, por el momento, estamos en la de bronce. Hay que reconocer que los jóvenes van todavía en la escuela y no se puede pedir permiso para salir a pasear, así que apenas llegan, comen rápido algo que preparo Joaqui. Hay que dejar a Polito, el más joven de los socios en casa de sus abuelos porque esta vez no puede acompañarnos y no es por falta de ganas sino que sus papás piensan que esta vez no es una ruta para el.
Tomamos fotos de la salida, estamos todos listos y no importa mucho el horario al fin, no vamos muy lejos y todavía estamos bien de tiempo para pasear llegando en Amealco. No somos muchos, están Sabás con Mina, Tawa con Bache, Pepin, Tamy, Diego, ellos van en cuatri y Jipé y yo en el Ranger. Mañana nos alcanzan Baldo, Graciela y Fer.
Todos estamos conciente que hay que trabajar mucho para la medalla. Pero la medalla de bronce como que no nos satisfecha mucho, queremos por lo menos la de plata, así que Tawa piensa en como ayudarnos y nos dice “mi cuatri esta rara, siento que la dirección no esta bien, hay algo en las llantas”. Primero paro para checar que esta pasando, apenas van 15mn que empezamos la ruta. Tamy maneja unos metros la cuatri, después la agarra Sabás y finalmente la devuelven a Tawa, parece que el problema no es tan grave, pero Tawa no lo ve así e insiste en que su cuatri no anda muy bien.
Otra vez nos paramos, si seguimos así, vamos a lograr la medalla de plata porque el retraso aumenta.
Nos orillamos todos para ver el problema de las llantas mas seriamente y sorpresa, tenia razón Tawa, todo viene de un balero, hay que cambiarlo pero aunque tenemos una caja de herramientas, no tenemos lo que se necesita para este tipo de reparación. Sabás se va con su cuatri en búsqueda de un balero en Encinillas, acabamos de pasar el pueblo, un momento después Tamy lo sigue para más herramientas.
El tiempo pasa, al total nos quedamos hora y media, sentados en la asfalto platicando, riéndonos, esperando el regreso de Sabás. Tamy regresa con las herramientas pero no sirven. Ultima opción, llamar al hermano de Sabás, Isaac, para que viene con una camioneta y un remolque, ni modo, hay que dejar la cuatri. Tawa se va a subir con Pepin y su hijo Bache con Tamy. Creo que ya nos ganamos la medalla de plata porque retomamos la ruta son las 19h casi de noche, esta muy comprometido el paseo en las calles de Amealco.
Llega Isaac en su camioneta con sus hijos, todos ayudan en cargar la cuatri de Tawa en el remolque, para esta cuatri se acaba el paseo, lo bueno es que siempre hay una opción para seguir con la ruta como lo teníamos planeados o casi.
Ya no podemos pasar por los senderos previstos y eso que Sabás y Jipé hicieron una ruta de exploración para que justamente no nos encontramos con sorpresas de que hay partes peligrosas o inexistente ya que normalmente la ruta la sacamos de Google pero puede haber unos cambios. Todo estaba listo para pasar por lugares bonitos, pararnos a ver una cascada y un sin fin de otras cosas que nos comentaron. Ni modo, como de regreso el domingo tenemos que pasar por este mismo camino, lo dejamos para este entonces. Por el momento, nos vamos casi todo el tiempo por carretera como es de noche, casi no cruzamos coches, es muy seguro.
Hace mucho frío una vez que se mete el sol y todos llegamos congelados en Amealco aparte que es un poquito más alto que nuestro pueblo. Nosotros estamos a 2400 m.s.n.m. y Amealco esta a 2650 m.s.n.m. Que bueno que es de noche, no podemos hacer fotos así que me quedo con los guantes puestos. Soñamos con un baño caliente. Dejamos las maletas en la recepción del hotel el tiempo que los chóferes vayan a dejar las cuatris y el Ranger en el estacionamiento que se encuentra del otro lado de la plaza que esta frente al hotel. Hoy, recorrimos 63 Km.
Antes de empezar la ruta nos decía Pepin que tenia ganas de hacer una de noche, casi lo logro aunque el se refería en manejar toda la noche, y lo hicimos solamente durante hora y media, pero algo es algo.
Creo que sin problema nos ganamos la medalla de oro, jamás desde el principio de las rutas tuvimos un retraso tan importante en el horario (aparte del día en que Jipé y yo tuvimos el accidente en Chachalacas y que se cancelo la salida). Ya vamos por 3 horas de retrazo porque llegamos en Amealco son las 20h 30 y pensábamos llegar a las 17h o 17h 30 a más tardar. Ya ni hablar del paseo después de instalarnos al hotel a parte de que todo esta cerrado en el pueblo.
Primero, dejamos las maletas en las habitaciones, veremos después de la cena para instalarnos por el momento, todos tenemos hambre así que vamos al restaurante del hotel a pedir algo. La carta esta muy buena y hay de que escoger para merendar.
Nos quedamos platicando en la mesa hasta que vemos las meseras con la bolsa a la mano, parece que esperan que nos vayamos para irse ellas también así que dejamos la mesa para sentarnos en el lobby el tiempo que llega el taxi de Pepin. El no puede hacer la ruta de mañana así que se regresa a su casa y nos alcanzara mañana para la cena.
Tawa se queda con su cuatri para la ruta de mañana, esta un poquito inquieta porque no la conoce, pero confiamos en que rápidamente se acostumbrara a ella.
Se va Pepin y todos nos vamos a nuestra habitación a bañarnos, son las 23h y mañana hay que estar listos para desayunar a las 7h 30.
Sábado 29 de Octubre 2011
No tuvimos suerte para bañarnos ayer anoche, nosotros que soñábamos con un baño caliente, apenas si el agua estaba tibia. Pero ni modo, después de una ruta hay que refrescarse (eso si que fue refrescante).
Una cobija más sobre la cama (por los que vieron que había más cobijas en el closet) y la noche fue muy agradable y reparadora.
A las 7h 30 estamos casi todos en el restaurante. Llegaron Baldo, Graciela y Fer, hace mucho frió, parece que más aquí que en nuestro pueblo, pero confiamos en que sale el sol dentro de un ratito para tener un bonito día.
Preguntamos a quien le toco agua caliente ayer anoche, pero parece que a nadie, a lo mejor porque llegamos tarde y se había acabado con los otros huéspedes.
Desayunamos muy a gusto, no tenemos mucha prisa, el estacionamiento donde están las cuatris y el Ranger abre a las 9h.
Cruzamos la plaza, están instalando carpa, dicen que en la noche habrá cine al aire además de unos puestos de artesanía. Tomamos unas fotos de la iglesia y de nosotros en grupo. Llegamos en el estacionamiento, el tiempo de cargar lo que vamos a necesitar en el transcurso del día y salimos de Amealco son las 9h 25, una parada para cargar gasolina y la ruta empieza realmente a las 9h 40. Ya salio el sol y hace menos frió.
En las 10h, entramos en el bosque, la vista esta preciosa, a lo lejos se ve el cerro donde vamos a subir, el cielo esta azul, no hay ninguna nube. No se acuerda Tawa que ya tenemos la medalla de oro asegurada desde ayer y empieza otra vez a decirnos que su cuatri, que es la de Sabás, tiene un problema, se para sola. Pero no, no es broma, pero casi, solamente tiene que acostumbrase a manejarla, confiamos en que pronto se acoplan, ella y la cuatri. Esta cuatri al principio era de ella, solamente que hace mucho que no la maneja. Sabás y Mina están con la cuatri de Pepin.
Hay una bajada muy importante, pero la tomamos despacito, sin prisa, disfrutando del paseo, tomando fotos.
Hacemos una parada de 20mn en una tienda de abarrotes que se llama “Buenos Aires”, quien sabe porque este nombre porque los dueños son mexicanos, a lo mejor suenan con ir un día en Argentina o a lo mejor en este pueblo el aire es bueno? Ahí vamos a comer de regreso, son familiares de Francisco, el guía que nos enseño la ruta. Parece que la señora guisa muy rico, aquí en la región, la especialidad es el guajolote, a ver como lo prepara. Platicamos con ellos, tomamos un refresco, comemos unas botanas y hacemos otras fotos. Nos despedimos con la promesa de volver con ellos a las 15h.
Dejamos el lugar son las 11h 30, todavía nos falta para llegar a la mita de la ruta. Nos paramos en pleno bosque casi media hora. Así nos gusta hacer las rutas, tomando tiempo de disfrutar del medio ambiente. Teniendo Tamy con nosotros, es risa asegurada. No se donde le vienen tantas ideas para hacernos reír. Ahora se hace el que se resbalo y que quedo atrapado con el tronco de un árbol y ahí se queda el tiempo necesario para que podamos tomar fotos, después, el, su hermano Diego y Bache se dejar caer y resbalar como si estuvieran en la nieve, el colchón de hojas secas amortigua la caída.
No se quien primero ve que el tronco de un árbol muerto tiene en medio un hueco y todos, uno tras otro, intentan atravesarlo con una piedra, algunos lo logran, otras están muy cerca, a veces la piedra pega la orilla del hueco y se va por otro lado. Hay gritos cuando la piedra pasa por el centro del tronco, hace eco en el bosque. Que momentos inolvidables. Todos los señores y los jóvenes practican el lanzamiento de piedras que sean Fer, Tamy, Diego, Bache o Baldo, Sabás y Jipé. Las mujeres los estamos apoyando, Tawa esta con ellos y Graciela y yo desde nuestro Ranger.
Y otra vez hay que volver a ponerse el equipo de seguridad, casco, lentes y guantes. Seguimos nuestro camino hasta el punto más alto de todo el recorrido, estamos ahora a 3200 m.s.n.m.
Llegamos aquí son las 13h 45. Estamos en pleno bosque y sorpresa, aquí todos, tenemos señal con el celular, cosas que no tenemos en nuestro pueblo. Tamy y Sabás se van en la cuatri de Tamy a ver si se ve algo de un punto más alto todavía, pero regresan y nos dicen que no, pensábamos ver el cerro del pueblo donde vivimos, pero no, los árboles mascan la vista.
Nos quedamos platicando y riéndonos. Jipé quiere que manejo el Ranger, no quiero, no me siento segura, pero para darles gusto, me siento en el asiento del chofer para tomar una foto, nada más. Baldo se acuesta debajo del Ranger como si lo había atropellado, mueve los brazos. No sabia que Sabás estaba grabando, pensaba que solamente tomaba foto, pero cuando vemos el video, parece de verdad que lo atropello. Podría hacer telenovela, actúa muy bien
Y otra vez arrancamos con la ruta, son las 14h 10 y a las 15h 10 estamos en el “restaurante”, listos para comer y con mucha hambre. La mesa esta puesta, estamos bajo una lona, muy a gusto. La señora preparo un arroz rojo y nos sirve un consomé de guajolote delicioso. El señor, para darle gusto a Jipé que le hizo creer que le gustaba el pulque, nos consiguió un garrafoncito. Lo probamos primero natural y después con jugo de guayaba.
Aquí venden queso del rancho, así que para probarlo, pedimos unas quesadillas. Esta rico el queso y una vez caliente, el sabor es más fuerte. De postre, cada quien escoge las galletas que le gusta. A las 16h 30, nos despedimos de los dueños de la tienda con la promesa que si un día volvemos a pasar por acá, nos pararemos a saludarlos.
Subimos a la cima de un cerro que vimos a la mañana de lejos, ahí hay una cruz, no se porque ni el significativo. Subiendo sobre la base de la cruz, tenemos una vista preciosa sobre los cerros que rodean nuestro pueblo. Bueno, por los que conocen bien la región, porque para mí, todos son iguales. Pero no importa, escucho las explicaciones que nos da Sabás.
No es tan fácil que lo parece subir la base y Mina nos hace reír, ni se quita el casco. La ayudan a levantarse porque queda como atrapada ni se puede levantar ni se puede bajar. Es muy estrecho, pero ahí cabemos casi todos para tomar la foto del recuerdo. ¡Y la bajada! Es todo un show para algunos. Ya paso otra media hora, son las 17h 30 y hay que empezar el camino de regreso al hotel.
Pasamos a saludar a Francisco y platicar con el de la ruta que acabamos de hacer, y decirle lo tanto que nos gusto todo.
Dejamos las cuatris y los rangers en el mismo estacionamiento que ayer, cruzamos la plaza y legamos en el hotel son las 18h 30 y todos queremos un baño bien caliente, tenemos el pelo lleno de polvo.
El que se va primero, casi corriendo es Tamy, le dice a su hermano Diego de apurarse porque ayer les toco agua fría y piensan que fue porque se bañaron los últimos, pues no, igual, no tenemos agua caliente y hay que bañarse, no podemos quedarnos así. Parece finalmente que el agua caliente llega a las 19h 30, es a decir una vez que casi todos estamos bañados. Algunos tienen suerte y les toca agua caliente por bañarse los últimos de la habitación.
Nos encontramos todos en el patio del hotel, ahí nos prepararon una mesa grande, vienen Pepin y Conchita a cenar con nosotros. Nos tomamos un tequila (un detalle de Baldo) platicándole a Pepin como nos fue y escuchando a Conchita darnos los detalles de cómo era el hotel antes, cuando todavía era la casa de sus papás.
No hay mucha luz en el patio y aunque tiene un techo, es un poquito fresco, pero yo escogí el patio en lugar de la sala del restaurante porque se me hizo más practico para quedarnos a platicar el tiempo que queremos, el restaurante cierra a las 22h y ayer casi nos dijeron si pudiéramos irnos para que ellos acabaran con su día de trabajo.
Resulta que estamos tan cansados que a las 22h 30, todos nos vamos a dormir. Esta noche se retrasa el reloj de 1h y nos viene muy bien, así vamos a descansar una hora más.
Nos despedimos y nos citamos mañana a las 8h para el desayuno.
A dormir. Hoy la ruta fue de 99km.
Domingo 30 de Octubre 2011
Nos cayo muy bien esta hora adicional esta noche, todos estamos dispuestos a seguir con la ruta que nos va a llevar de regreso a casa, pero por el momento queremos desayunar. Nos dijeron que en el mercado se come muy bien y no lo dudamos si no es la primera vez que cando salimos en cuatri, desayunamos en los mercados. Siempre la comida es muy rica.
Vamos caminando, es a 2 cuadras del hotel. En el camino nos paramos a comprar unos panes dulces para acompañar el café. Pensamos dar una vuelta después para comprar algo de Halloween para la mesa de ofrendas que queremos poner en casa. Polito le encargo a su mamá algo para su escuela.
Damos al vuelta a todo el mercado y o sorpresa, aunque huele muy rico, no hay mesas y debemos comer de pie, eso no nos gusta para nada así que salimos del mercado buscando otra opción. Sabás y Jipé nos platican de un restaurante que esta a la salida de Amealco, pero hay que tomar las cuatris, a pie no podemos ir.
Primero nos paramos a comprar unas calaveras de azúcar, Tawa para su hijo y Baldo para su nieta. Vemos a un sitio de taxis y pensamos que es una opción irnos en varios taxis hasta el restaurante. Como Graciela y Fer debían alcanzarnos al mercado, se queda Baldo para avisarlos que no vamos a comer ahí.
En un taxi se suben, Sabás, Jipé, Diego y Bache, en el otro, Tawa, Mina, Tamy e yo y en el ultimo, que casi llega al mismo tiempo que nosotros, Graciela, Fer y Baldo.
El restaurante es muy agradable a primera vista, se llama “Los Cipreses”. Que risa en esta mesa, Tamy es muy observador y nos hace reír mucho imitando a Tawa que por supuesto lo toma muy bien y se ríe aun más que el. Comemos unos huaraches enormes con carne, nopal, frijoles y queso, otros comen pancita también deliciosa, otros quesadillas u otro tipo de huaraches, y por supuesto que el pan de dulce acompaña de maravilla al cafecito por los que les gusta el café de olla.
Saliendo del restaurante, caminamos hasta el sitio de taxis para regresar al hotel cargar las maletas. A las 10h 45 dejamos el hotel y a las 11h 20 el estacionamiento. Baldo, Graciela y Fer se regresan en la cuidad de México, van a pasar a nuestro pueblo a dejar la cuatri de Fer y el Ranger y siguen el camino, nosotros nos vamos por la ruta que no hicimos el viernes por falta de tiempo.
Efectivamente, el recorrido esta muy bonito, a mi se me hace que pasamos varias veces por el mismo lugar y se lo comento a Sabás que se ríe y me dice que llegando a destinación, me va a enseñar en la computadora la ruta que hicimos para que vea que por supuesto que no, no lo dudo, no tengo el sentido de la orientación.
Nos paramos un ratito donde hay un puente con poquito agua abajo. Tamy (siempre el) hace el que se cae, pero tiene los pies en una varilla de fiero del otro lado de la barda. Cuentas fotos hicimos en esta ruta.
Llegamos en la cascada de Aculco, son las 13h 15, el tiempo de seguir tomando fotos, de disfrutar un rato del paisaje y volvemos a nuestra maquinas para seguir con la ruta.
Queríamos pararnos a comprar algo de artesanía en camino, pero para cagar las compras en la moto o en el Ranger, no es muy buena idea, además que todo es de barro y que se puede romper, mejor si un día queremos algo de por aquí, venir en coche.
Llegamos en casa de Joaqui son las 14h 15, ella nos espera con una muy rica comida que todos juntos disfrutamos comentando los días que acabamos de pasar, las anécdotas, las bromas, el clima en fin, todo lo que hizo de esta ruta, todo un éxito. Hoy hicimos 75km.
Al total la ruta fue de 237 Km.
Ahora a concentrarnos en la próxima, la ruta #18 que nos llevara, en diciembre, en Atzitzintla – Coscomatepec – Chachalacas, pasando de la nieve a la playa.
Nos vemos muy pronto para una nueva aventura.